¡Sal de tu tienda y encuentra tu palabra!

Por Staff

“¡Oh soberano Señor! ¿De qué sirven todas tus bendiciones si ni siquiera tengo un hijo?… Y lo llevó fuera, y le dijo: mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo así será tu descendencia. Y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia.” (Génesis 15:5 NTV)

 

Muchos de nosotros conocemos la historia de Abraham y Sara, que tuvieron a su hijo, Isaac, cuando eran ancianos. Abraham tuvo un encuentro con su palabra que lo iba a posicionar para realizar la voluntad de Dios.

 

Primeramente se encontraba en su tienda cuando el Señor le llama y le muestra su futuro, el deseo de su corazón: tener descendencia. Y lo lleva a alzar su vista al extenso e infinito cielo. Le muestra que como él ve el cielo con innumerables estrellas, le dice: Así será tu descendencia, y Abraham le creyó.

 

Fíjate en un detalle importante: lo tuvo que sacar de su tienda; acuérdate que en tiempos bíblicos se vivía en tiendas. Lo sacó y lo llevó al encuentro con su palabra, la cual cambiaría su destino y el de la humanidad.

 

Hoy, Dios quiere también sacarnos de nuestra tienda donde nos encontramos y darnos Su Palabra, para llevarnos a nuestro futuro y darnos vida.

 

Si leemos todo Génesis capítulo quince, nos daremos cuenta que Abraham estaba sumamente triste por el hecho de no tener descendencia, a tal punto de decirle a Dios: “¿…de que me sirve todo lo que tengo si no tengo a quién dejarlo?”

 

Sí, Abraham estaba en su tienda dándole vueltas y vueltas al asunto de su descendencia… y muy triste. De la misma manera estamos nosotros en nuestra “tienda”, que es nuestro problema; dándole vueltas y vueltas, sin salir de ella para tener el encuentro con la Palabra que va a traer cambios a nuestra vida.

 

Dios tuvo qué sacar a Abraham de su “tienda” y mostrarle todo lo que Él quería, e iba a hacer con él a través de su descendencia. “Abraham salió y tuvo el encuentro con su palabra”.

 

¿Estás en tu tienda enfermo (a)? “Sal al encuentro con tu palabra”

¿Estás deprimido(a)? “Encuéntrate con tu palabra”

¿Tienes problemas en tu matrimonio, en tu familia…? “Sal de tu tienda”

 

Así como Dios sacó a Abraham de su tienda para enseñarle lo que tenía preparado para él; así desea hacerlo con nosotros.

 

Salgamos de nuestra “tienda”, de nuestra situación. Salgamos al encuentro con la palabra que nos hará libres.

 

Que salga de su tienda el enfermo y se encuentre con esta Palabra: “Por su llaga he sido curado(a)”. “Te devolveré la salud y sanaré tus heridas”; “Envió su palabra y lo sanó; los arrebató de las puertas de la muerte”.

Que salga de su tienda el afligido y se encuentre con esta Palabra: ¡Socorro, Señor! Clamaron en medio de su dificultad, y Él los salvó de su aflicción.

Que salga de su tienda el que tiene enferma su alma y diga: “Sana mi alma y será liberada”

 

Salgamos de nuestra tienda al encuentro con Su preciosa Palabra y Su mano a nuestro favor.

 

ORACIÓN: Gracias por tu preciosa e infinita Palabra que en cualquier dificultad, levanto mi mirada, busco tu rostro y tú me dices con amor: “Buscadme y viviréis”. Tu palabra es medicina a todo mi ser, tu rostro buscaré. Saldré de mi tienda e iré al encuentro con mi palabra para ser libre. Gracias por tu infinito amor y cuidado. En el nombre de Jesús. ¡Amén!

Comentarios

Más devocionales