Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados.” (Isaías 57:15 RVR1960)
Cuando estamos buscando casa nos ponemos a soñar ¡cuánto nos gustaría vivir en las alturas, en el penthouse! Poder observar las montañas y todo el panorama, ¿no es cierto? Pues es el lugar más alto y además lujoso. ¡Podemos soñar!
Pero déjame decirte que nosotros como sus hijos tenemos nuestro Penthouse, sí, ¡aquí en la tierra!
“Jehová el Señor es mi fortaleza, El cual hace mis pies como de ciervas, Y en mis alturas me hace andar. Al jefe de los cantores, sobre mis instrumentos de cuerdas.” (Habacuc 3:19 RVR1960)
“En mis alturas me hace andar” como hijos tenemos la oportunidad de andar en las alturas, no necesitamos de lujos, ni desear aquí en la tierra nada.
Él nos lleva a vivir en los lugares altos, aleluya.
¿De qué manera? La palabra “altura” hace referencia a la presencia del Señor, donde Él vive “en las alturas” y la santidad, y no en lo bajo.
¿Qué quiere decir esto? Creyendo en su Palabra, obedeciéndola, y teniendo la confianza en cada promesa que El nos ha dado. ¡Él vive en las alturas y nos hace andar junto con Él!
Pero desgraciadamente hay procesos en nuestra vida que tenemos que pasar sí o sí. Pues estos nos transforman para crecer en fe y nos llevan a lugares bajos:
“¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí? Espera en Dios; porque aún he de alabarle, Salvación mía y Dios mío.” (Salmos 42:11 RVR1960)
“¿Por qué te abates, oh alma mía, Y por qué te turbas dentro de mí?” Cuando estamos abajo, muy abajo empezamos a dudar de sus promesas, de sus misericordias que son nuevas cada mañana. Pero cuando andamos en las alturas decimos: “Espera en Dios”.
En lo bajo: por qué andaré enlutado…
“Diré a Dios: Roca mía, ¿por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué andaré yo enlutado por la opresión del enemigo?” (Salmos 42:9 RVR1960)
Pero en las alturas: “Roca mía”.
Jehová en las alturas es más poderoso Que el estruendo de las muchas aguas, Más que las recias ondas del mar.” (Salmos 93:4 RVR1960)
Él desea que todo el tiempo estemos en su presencia en las alturas donde podemos experimentar la paz, aún en circunstancias difíciles; que permanezcamos en las alturas aunque abajo estén las cosas adversas.
Sólo viviendo en el Penthouse de Dios podremos caminar firmes aunque abajo estén las arenas movedizas en nuestro caminar.
Él desea que nos mantengamos en las alturas de la misma manera que las águilas:
“Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.” (Isaías 40:31 RVR1960)
Vayamos al Penthouse de Dios, a su presencia donde remontaremos en las alturas y tendremos paz en medio de la tormenta.
“Que nos mantengamos en las alturas en el Penthouse de Dios”
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