«En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar, hasta el día en que fue recibido arriba, después de haber dado mandamientos por el Espíritu Santo a los apóstoles que había escogido; a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios.» (Hechos 1:1-3 RVR1960)
Es domingo de Pascua, domingo de Resurrección, domingo de Gloria, domingo Santo.
La Pascua, es un tiempo para pensar en “NUEVA VIDA”. “EL SEÑOR HA RESUCITADO, VERDADERAMENTE HA RESUCITADO”
Esta Semana Santa es una Semana muy excepcional ¿Cierto? Pienso que nuestro punto de vista de esta fecha ha sido cambiado de una forma religiosa a una nueva vida transformada ¿Verdad?
¡Qué forma de hablar del Señor a Su Iglesia y al mundo, justo en esta temporada, cuando todo es algarabía y movimiento, seguimos en cuarentena, vaya que tiene humor el Señor, para que hagamos un alto y alcemos nuestros ojos a Él!
PASCUA, “nueva vida”, después de haber resucitado dice la Palabra: “…después de haber padecido se presentó vivo con muchas pruebas indubitables, apareciéndoseles (a los apóstoles) durante cuarenta días y hablándoles acerca del reino de Dios.”
Y en todo este encerramiento, en esta cuarentena ¿Con cuántas pruebas indubitables se ha presentado el Señor en tu vida?
Él es nuestra PASCUA, nuestra nueva vida está en Él:
«Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.» (Colosenses 3:1-3 RVR1960)
Creo que Él escogió una buena temporada para cambiar el sentido que teníamos de Semana Santa, y darle el valor que debe tener en nuestra vida. Él vino para salvarnos, murió en una cruz, pero al tercer día resucitó.
Él nos dice: “Todo lo he dado por ti, lo he perdido todo por ti, sólo te pido: haz un alto en tu vida, toma lo que verdaderamente tiene valor, comienza a reordenar tus prioridades, a retomar lo que es bueno, a vivir en abundancia”.
Como apareció a los discípulos, después de la resurrección, durante cuarenta días dice con pruebas indubitables, creo que también lo hará con nosotros en estos cuarenta días.
No menospreciemos este tiempo, justo esta Semana Santa para voltear, alzar nuestros ojos a Él, esperar en Él, porque seguramente nos sorprenderá con Su Gloria.
«Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.» (Hechos 1:4-5 RVR1960)
¿Quizá ésta será la manera para ser bautizados en el Espíritu Santo, para mantenernos y esperar Su promesa?
Mira qué interesante el significado de PASCUA:
El término Pascua proviene del latín páscae, que a su vez proviene del griego πάσχα (pasjua), una adaptación del hebreo פסח (pésaj), que significa “paso” o “salto”.
¡Paso o Salto! ¿Pasarás esta temporada igual o saltarás a una vida nueva y llena del Espíritu Santo?
¡JESÚS ES NUESTA PASCUA, JESÚS ES VIDA!
ORACIÓN DE FE: Jesús, abro mi corazón, y te pido que entres a mi vida, te acepto como mi Señor y mi Salvador, perdona todos mis pecados desde mi juventud hasta hoy, me arrepiento y dejo todo atrás, creo y acepto el sacrificio que hiciste en la cruz como la salvación de mi alma. Señor, dame la vida eterna y escribe mi nombre en el libro de la Vida. Ayúdame a ser una nueva persona, renovada y transformada, día a día en el conocimiento de tu verdad. Amén.
Comentarios