Creo que es buen momento para recordar las Bendiciones que Dios ha derramado sobre nosotros, pero no solamente recordarlas sino también valorarlas y alegrarnos por ellas para animarnos a seguir adelante y poder superar las pruebas que seguramente seguirán llegando a nuestra vida, pero que pasaremos con toda seguridad si confiamos en las promesas de Su Palabra.
Recordemos:
¡DIOS NOS HA ELEGIDO!
“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.” (S. Juan 15:16 RVR1960)
Yo oro para que podamos ver y valorar el hecho ser elegidos por el Gran Yo Soy, y hacernos partícipes de Su gran plan.
CUANDO ESTÁBAMOS HUÉRFANOS, NOS ADOPTÓ
“…en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, …” (Efesios 1:5 RVR1960)
Al adoptarnos y ser predestinados nos dio una identidad con el Padre; ya no tenemos que ir sin rumbo en la vida, Él es nuestra ancla firme, y nos hizo suyos por el puro afecto de Su voluntad ¡Aleluya!
TENEMOS SELLO DE GARANTÍA
“En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa.” (Efesios 1:13 RVR1960)
Este sello nos da sentido de pertenencia y nos dota de Su poder y salvación. ¡Amén!
SE MANIFESTARÁ
“El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ese es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.” (S. Juan 14:21 RVR1960)
Qué gran noticia para los que le amamos: “se manifestará” ¡Cuán maravilloso es poder experimentar Su poder en nuestra vida! Y sobre todo en este tiempo.
SU AMOR Y SU MISERICORDIA SON ETERNOS
“Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia.” (Jeremías 31:3 RVR1960)
Demos gracias al Señor por Sus misericordias y Su amor inagotable.
NOS DIO GRAN SALVACIÓN
“…quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,” (2 Timoteo 1:9 RVR1960)
Que en este tempo traigamos a la memoria todas estas bendiciones que ya son nuestras y que nos dan ánimo para seguir adelante en los tiempos difíciles que nos ha tocado vivir como humanidad.
ORACIÓN:
Gracias Padre, por recordarme tus bendiciones, atesorarlas y valorarlas, pues me ayudarán para animarme y saber que no estoy solo, que tú estás conmigo siempre, y siempre me ayudarás y me sostendrás con la diestra de tu justicia ¡Aleluya!
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